[vc_row][vc_column][tm_heading style=»thick-separator» tag=»h5″ custom_google_font=»» google_fonts=»font_family:Poppins%3A300%2Cregular%2C500%2C600%2C700|font_style:300%20light%20regular%3A300%3Anormal» text=»Los desafíos del nuevo gobierno “ecologista” de Gabriel Boric» font_size=»lg:32″][vc_column_text]
En campaña, el electo presidente de Chile, comprometió ser el “primer gobierno ecologista de Chile”, pero no será fácil.
Su gobierno deberá enfrentar mega sequías y el compromisos de descarbonización del país, la creación de una empresa nacional de litio en medio de la construcción de la nueva Constitución chilena.
Diálogo Chino
De pie frente a la multitud que salió a celebrar su triunfo, el presidente electo más joven de la historia de Chile, Gabriel Boric Font, fue categórico: “Destruir el mundo es destruirnos a nosotros mismos. No queremos más zonas de sacrificio, no queremos más proyectos que destruyan nuestro Chile, que destruyan a las comunidades (…) en nuestro gobierno va a ser prioridad evitar esa destrucción y tener un desarrollo compatible con el medio ambiente”, afirmó.
Con tan solo 36 años, Boric se convertirá el próximo 11 de marzo en el nuevo presidente de Chile, tras vencer en una histórica votación a José Antonio Kast, de extrema derecha, en diciembre pasado. Oriundo de la Patagonia, Boric se hizo conocido como uno de los líderes de las movilizaciones estudiantiles de 2011. Once años después, sucederá en el cargo a Sebastián Piñera, el mismo contra quien protestaba en las calles.
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El presidente electo, que está por terminar su segundo período como diputado, hizo de los temas ambientales y del cambio climático un punto central de su campaña. Se comprometió a ser el “primer gobierno ecologista de Chile”. En los primeros meses, deberá implementar una nueva ley marco de cambio climático, una reforma a la ley que rige el uso del agua y enfrentar una mega sequía que incluso ha puesto en duda el compromiso de Chile en cerrar sus centrales a carbón.
A eso se les suman algunos compromisos no menores: terminar con las zonas de sacrificio, áreas del país afectadas por conflictos socio ambientales, crear una empresa estatal que regule la extracción y uso del litio y promover un nuevo modelo de desarrollo sostenible.
Todo esto, además, en un contexto de debate constitucional. Para fines del presente año, el país deberá votar si aprueba la nueva Constitución, actualmente en desarrollo. Ya se vislumbran elementos como un Estado plurinacional y el reconocimiento de los derechos de la naturaleza.
Sequía y carbono neutralidad
“Al declarar que quiere ser el primer gobierno ecologista, Boric está mostrando que ya quedaron atrás los tiempos en que el desarrollo económico, el bienestar y el progreso eran antagónicos a la protección del medio ambiente y de los derechos humanos, que no es posible retroceder en la acción climática y que pretende entonces alinear a todos sus ministros en esta mirada”, opina Valentina Durán, directora del Centro de Derecho Ambiental de la Universidad de Chile.
Un sello ambientalista “transversal” fue uno de los puntos más llamativos del gabinete de 14 ministras y 10 ministros de Gabriel Boric.
Uno de los nombres más fuertes es el de Maisa Rojas, una reconocida científica climática que asumirá como nueva ministra de Medio Ambiente. “Mi rol es materializar que este sea el primer gobierno ecologista del país”, dijo en una de sus primeras entrevistas tras el nombramiento.
Maisa Rojas ha participado en distintos informes del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC), llegando a ser autora principal coordinadora de la primera parte del Sexto Informe de Evaluación (AR6), el mayor trabajo sobre ciencia del clima hasta el momento.
Aunque la política no es su mundo, viene participando en distintas instancias desde hace un tiempo. Fue nombrada por el gobierno saliente de Sebastián Piñera como coordinadora del comité científico asesor para la COP25. Hace solo unos meses fue invitada por la Convención Constitucional a presentar el último informe del IPCC, exposición clave para la posterior aprobación de “emergencia climática” que hizo el organismo.
La escasez hídrica es un tema de corto plazo importante, porque los conflictos socioambientales asociados al agua van a ser cada vez más frecuentes.
Rojas ya definió sus prioridades: Implementar la nueva Ley Marco de Cambio Climático (en sus últimas fases de trámite legislativo), promover el nuevo Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas y “trabajar por las zonas de sacrificio”.
Como directora del Centro del Clima y la Resiliencia (CR2), la nueva ministra fue partícipe activa del debate legislativo por la ley marco, que establece el compromiso de ser carbono neutral para 2050. “Si ustedes me preguntan cuál es la acción más importante que debiéramos realizar, es contar con esta ley”, dijo durante una de las sesiones legislativas.
Rojas identificó la sequía como uno de los principales desafíos, reconociendo que es un tema que deberá enfrentar en colaboración con otros ministerios, ya que hoy las decisiones respecto al agua en Chile cruzan decenas de organismos públicos.
Para Marcelo Mena, ex ministro de Medio Ambiente (2017-2018), “la escasez hídrica se enfrenta desde la coordinación intersectorial. Es un tema de corto plazo importante, porque los conflictos socioambientales asociados al agua van a ser cada vez más frecuentes”.
La transición energética.
La mega sequía en Chile ha llegado a amenazar los compromisos de descarbonización del país. El Coordinador Eléctrico, organismo técnico que supervisa el sistema eléctrico, ha sugerido la postergación en un año del cierre de las centrales Bocamina 2 y Ventanas 2, con el argumento de evitar una crisis de abastecimiento, producto de la baja en el suministro de centrales hidroeléctricas.
Quién deberá hacer frente a esos desafíos y liderar las agendas de descarbonización e hidrógeno verde es el académico Claudio Huepe, quien deja el Centro de Energía y Desarrollo Sustentable de la Universidad Diego Portales para asumir como ministro de Energía. Militante de Convergencia Social (el partido del presidente electo), Huepe participó desde los inicios en la creación del programa de gobierno de Gabriel Boric.
Para Ana Lía Rojas, directora ejecutiva de la Asociación Chilena de Energías Renovables, el desafío inmediato del ministro Huepe será enfrentar la estrechez de un sistema eléctrico. Pero más allá, afirma que lo que este gobierno decida en los próximos cuatro años serán “la base del diseño regulatorio que nos permita dedicarnos en los próximos 25 años a transitar a carbono neutralidad de la economía y del sector eléctrico 100% renovable”.
Aunque Chile ha sido pionero en energías renovables (eólica y solar representaron el 21% de toda la energía generada en diciembre de 2021), en la industria preocupa el alto nivel de “vertimientos”, como se conoce a la cantidad de energía renovable que, por falta de infraestructura y criterios de operación, no llegan a ser inyectadas y consumidas en el sistema. Solo en enero de este año se acumularon 160 GWh “perdidos”, más que todo lo registrado en 2019.
De todas maneras, desde las empresas de renovables miran con buenos ojos al nuevo gobierno: ”Coincidimos con que hay muchas formas de descarbonización, no es solo retirar carbón y agregar renovables, sino que se nutre de muchas líneas de acción que están contenidas correctamente en el programa del presidente Boric”, asegura Rojas.
El programa de energía reconoce la construcción de líneas de transmisión y centrales de abastecimiento como claves para la transición energética, además de establecer “mesas de transición justa” en distintos territorios del país.
El transporte y la economía en Chile
Otros nombres de ministros y ministras también permiten vislumbrar el sello ambiental que se le pretende dar al gobierno.
En el ministerio Transporte estará Juan Carlos Muñoz. Doctor en Ingeniería Civil y Ambiental, Muñoz se desempeñó como director del Centro de Desarrollo Urbano Sustentable (Cedeus). Reconocido “ciclista urbano”, ha promovido un sistema de transporte público y gratuito.
Una de las promesas de campaña es una agenda “transporte doble cero”: un sistema de transporte público eléctrico, sin emisiones y sin tarifas para la ciudadanía, que sería lanzado como piloto en la ciudad sureña de Valdivia. En el programa también está el aumento del impuesto al combustible para las industrias y grandes contaminantes.
En el ministerio de Hacienda estará el renombrado economista Mario Marcel, quien ejercía como presidente del Banco Central de Chile y tiene una dilatada trayectoria en organismos internacionales y políticas financieras.
Al declarar que quiere ser el primer gobierno ecologista, Boric está mostrando que ya quedaron atrás los tiempos en que el desarrollo económico, el bienestar y el progreso eran antagónicos a la protección del medio ambiente y de los derechos humanos.
En una entrevista, Marcel afirmó: “Tenemos que empezar a pensar en una producción sustentable, que es más competitiva y que cada día se hace más evidente. El mundo entero valora la reducción de emisiones de carbono y la protección del medio ambiente. Hoy, vender productos verdes tiene mayor éxito que vender productos grises”.
Como presidente del Banco Central, Marcel promovió la incorporación de riesgos del cambio climático en sus análisis de estabilidad financiera. Además, en el marco de la COP26, el Banco Central liderado por el nuevo ministro se sumó a una alianza internacional para “analizar y cuantificar riesgos a la estabilidad financiera”. Y en noviembre del año pasado, Marcel se reunió con el profesor Partha Dasgupta, referente en economía de la biodiversidad y en la incorporación de servicios ecosistémicos al análisis económico.
El rol de la minería
En el ministerio de Minería asumirá Marcela Hernando, médica y diputada. Hernando liderará dos agendas importantes que pueden marcar una nueva ruta en la política minera de Chile: la creación de impuestos a la minería del cobre, con el que se espera recaudar 1% del PIB, y la creación de una Empresa Nacional del Litio “que desarrolle una nueva industria nacional de este recurso estratégico, con protagonismo de las comunidades y agregando valor a la producción”, según dice el programa de gobierno.
El litio fue precisamente el primer punto de conflicto entre el gobierno entrante y el saliente. En octubre se publicó una convocatoria para licitar la exploración y producción de 400 mil toneladas de litio. El presidente electo lo calificó de “un amarre de última hora”.
Los equipos de minería de Boric y Piñera se reunieron por este tema, en el que la administración entrante pidió formalmente posponer la licitación, para incorporar criterios de retribución a las comunidades e inversión en investigación y desarrollo. La licitación, aunque equivale al 4,4% del total de reservas de litio del país, son, según el nuevo Subsecretario de Minería, Willy Kracht, en realidad el 25% de las zonas disponibles para ser explotadas.
La Corte de Apelaciones de Copiapó ordenó congelar la licitación tras un recurso de protección interpuesto por comunidades locales. Esto fue después de que ya había sido asignada a la filial de la multinacional china BYD y a la empresa local Servicios y Operaciones Mineras del Norte S.A.
Chile y el Acuerdo de Escazú
Como nueva Canciller estará Antonia Urrejola, ex presidenta de la Comisión Interamericana en Derechos Humanos (CIDH), lo que fue visto inmediatamente como una señal de Boric de que su gobierno de izquierda no conjuga con otros como Nicaragua y Venezuela.
Desde la CIDH, Urrejola defendió la necesidad de que los países se sumen al Acuerdo de Escazú como una forma de fortalecer las políticas públicas ambientales frente a la emergencia climática. Siendo candidato, Boric se comprometió a adherir al Acuerdo y enviarlo al Congreso para su ratificación antes del día de la tierra, es decir, el 22 de abril de este año. Maisa Rojas también lo confirmó, asegurando que “la firma de Escazú es lo primero que se va a hacer”.
La primera Conferencia de las Partes (COP) del Acuerdo, que reunirá a los países firmantes, se realizará en Santiago, en la sede de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe de Naciones Unidas (CEPAL) entre el 20 y 22 de abril.
Fuente: El Ciudadano[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][tm_spacer size=»lg:30″][/vc_column][/vc_row]